Gossip Girl se despide de la única forma que sabe: desde la estupidez

Llegó un momento en el que parece que todo lo relacionado con esta serie está directamente conectado con la estupidez: personajes cuya inteligencia disminuye con cada temporada, guionistas que ni si quiera han visto lo que ocurrió un año antes para hacer que las tramas encajen, y espectadores que son tratados como tontos que no pueden recordar lo que pasó cinco episodios antes. Esto se puede tomar de muchas formas: o indignarte, ponerte a gritar y romper la pantalla del ordenador mientras clamas al cielo que has perdido seis años de tu vida con semejante bazofia, o simplemente descojonarte y reírte con todas las incoherencias que se han ido marcando. Yo he optado por la segunda opción.

(Atención, spoilers del último episodio de Gossip Girl)

Dan Humphrey es Gossip Girl

Da igual que casi expulsaran a Dan de la escuela por culpa de Gossip Girl, que el mismo publicara que le puso los cuernos a su novia, que el mismo se sorprendiera de lo que él mismo había escrito aunque estuviera solo en una habitación… da igual. Dan Humphrey era Gossip Girl, y su hermana Jenny lo sabía, aunque desde el primer episodio se ve que esto no encaja. Da igual. Pero quizá lo más indignante/divertido de la situación es que de repente A NADIE le importa. Nuestros protagonistas llevan seis años intentando hundir a la bloguera anónima, quejándose de que les ha estado amargando la vida, que se trataba del cáncer de su sociedad, y de repente “JAJAJAJA DAN ES GOSSIP GIRL QUE RISA!” y todos tan felices… especialmente Serena. El episodio del señor X de Los Simpson tenía más lógica que todo esto.

Serena, la persona más estúpida de la galaxia.

Todos sabemos que Gossip Girl siempre ha estado especialmente obsesionada con Serena (hasta aquí “encaja” que Gossip Girl sea Dan), pero ha estado obsesionada para mal, para hacerle daño. Es cierto que Serena se quejaba mucho y que cuando dejaba de aparecer en este medio también se quejaba, pero lo que es incomprensible es que después de años de tortura  y de pérdida de intimidad, Dan le diga que en realidad Gossip Girl es una carta de amor muy larga y que ella se lo trague.

DAN: Hola Serena. Llevo años llamándote irrelevante, drogadicta, puta y estúpida por Internet. Además escribí un libro en el que te dejaba fatal y un capítulo en Vanity Fair en el que te dejaba peor aun… pero todo era una carta de amor

SERENA: ¡Oh Dan! ¡Te amo! ¡Casémonos!

No suficiente con esto, Serena tiene que convencer al resto de que Dan no es tan malo porque en el fondo todos han enviado chismes a Gossip Girl y nadie es perfecto. ¿¡EN SERIO?! Obviamente no pueden hacer preguntas, lo aceptan, se ríen y ya está, porque si las hicieran harían ver al espectador que nada tiene sentido.

De tal astilla… ¿tal palo?: Lily

Si la hija es tonta, la madre no podría ser menos. Lily acaba de nuevo con William, el padre de Serena. Este señor hizo pactos con Ivy, la archienemiga de Lily, para engañarla, y ya no solo eso, sino que en la tercera temporada casi mata a Lily por recetarle mal las medicaciones a propósito. Aceptamos barco como carta de amor muy larga.

Lo peor de este final es que si realmente hubiera estado ideado desde el primer momento y no tres semanas antes de rodarlo, hubiera sido enorme, aunque todavía no sé que prefiero, la satisfacción de un final que encaje, o las risas que me estoy echando cada vez que me acuerdo de algo nuevo que carece totalmente de sentido.

En el 2017 los vestidos son así de feos

 Aun así no todo ha sido horripilante. Las bromas de “yo creía que Gossip Girl era Dorota”, los cameos de personajes que han ido apareciendo a lo largo de la serie y la escena de Kristen Bell y Rachel Bilson han puesto algo de cordura a una series finale estúpida..

La verdad es que tampoco nos podemos quejar. Gossip Girl tiene un final al nivel de la serie en general: una mierda. Hasta siempre Gossip Girl, serás basura, pero tú siempre has estado ahí, y algo bueno nos aportarías si hemos aguantado tanto tiempo. No te olvidaremos nunca, descansa en paz.

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