BuenAgente sorprende

(Sin spoilers)

No sé qué pasa últimamente con las promos de las comedias españolas que siempre pintan la serie peor de lo que es en realidad. Pasó con Los Quién, y ha vuelto a pasar con BuenAgente, la nueva comedia de Globomedia para LaSexta. Aunque no esperaba encontrarme con nada bueno, efectivamente, no me equivoqué y la serie no me ha mostrado nada que no hayamos visto por estos lares, pero aun así me ha sorprendido muy gratamente al sacarme muchas más carcajadas de las que me imaginaba.

Casualmente, la trama principal de la serie tiene mucho en común con la mencionada anteriormente, Los Quién: Un matrimonio recién divorciado que acaba viviendo uno enfrente del otro. A pesar de esta similitud, la comedia de laSexta supera con creces a la de la cadena triste, aunque al tratarse de un humor diferente los gustos personales pueden influir mucho en esta opinión.

La clave de esta comedia reside en unos personajes muy exagerados llevados en algunas ocasiones al punto de la autoparodia, como la abuela de derechas que se pasa todo el tiempo lanzando pullas contra el Partido Socialista y sus decisiones a lo largo de la historia de la democracia española. Aquí encontramos otro coincidencia con Los Quién, la abuela de derechas de la familia, un personaje al que en BuenAgente se le saca muchísimo más partido que en la serie de Antena 3.

Estos personajes tan exagerados vienen acompañados por unos chistes y gags bastante graciosos, que aunque en la mayoría de las ocasiones se basan en gritos y chistes de contenido sexual, no cae en lo ordinario ni en el humor de “caca culo pedo pis”. Estos personajes y estos gags combinados con unas situaciones incómodas y embarazosas hacen que la comedia te saque varias carcajadas a pesar de que la serie sea más de lo mismo y no ha hecho temblar los cimientos de la comedia española.

Como ya he dicho varias veces, más que las premisas iniciales, es un buen guión lo que convierte una comedia en una buena comedia aunque la trama no sea la más original de la historia de la ficción, y en este caso se cumple esta regla. 

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